

Hora de construir,
de montar el retablo pieza a pieza
y alumbrar los espacios de la vida.
Mira aquí para ver
el tiempo de los juegos,
el lugar del amor,
el sitio de la risa,
el resplandor primero de la llama:
teselas luminosas
de un mosaico sin sombras.
Tómalo; para ti: el fuego es tuyo.
Quiebra el viento la vela.
Callado, como siempre,
se adelanta lo oscuro
con sus heraldos negros
sembrando por el aire
la plomiza fanfarria
de una música opaca.
Mira otra vez y dime,
en medio de la niebla,
qué es lo que ves ahora:
¿Más allá de nosotros?
Fama de la ceniza.

Francisco Ruiz Noguera
(Arquitectura efímera)
